De pequeña al leer este primer versículo pensaba: "Señor Jesús, nunca voy a olvidarte, siempre estarás presente en mi corazón." y cerraba mis ojos y me repetía que no lo olvidaría.Al crecer un poco más, creía que llegaría un día de la vida en la tierra donde toda la humanidad sufriría la llegada de "los días malos"...
Hace un tiempo recordé este pasaje y comencé a recordar todas las cosas que hacía en la iglesia, muchas de las cuales aún hoy sigo haciendo, pero otras tuve que dejarlas en otras manos más jóvenes... Por momentos sentí culpa, por dejar algo que Dios había puesto en mi corazón siempre; lloré al verme hacer las cosas a medias y me frustré aún más, al pensar que le había fallado por no responder a Su llamado.
Servir a Dios es lo más lindo que podemos hacer, y Él desea que lo hagamos con amor y felicidad, aunque muchas veces resulte difícil.
Son en esas ocasiones, cuando no podemos continuar y no sabemos qué es lo que debemos hacer, cuando el mismo Jesús aparece, nos rodea con su amor y misericordia, y nos trae luz y paz.
En una prédica reciente, de la iglesia a la cual asisto se habló de las Prioridades de un cristiano, algo que no siempre tenemos presente, o que nos olvidamos con el correr del tiempo.
1- Ser lleno del Espíritu Santo
Efesios 5:11-17No tengan nada que ver con las obras infructuosas de la oscuridad, sino más bien denúncienlas, porque da vergüenza aun mencionar lo que los desobedientes hacen en secreto. Pero todo lo que la luz pone al descubierto se hace visible, porque la luz es lo que hace que todo sea visible. Por eso se dice: «Despiértate, tú que duermes, levántate de entre los muertos, y te alumbrará Cristo.»
Así que tengan cuidado de su manera de vivir. No vivan como necios sino como sabios, aprovechando al máximo cada momento oportuno, porque los días son malos. Por tanto, no sean insensatos, sino entiendan cuál es la voluntad del Señor.
2- El cónyuge es la segunda prioridad del cristiano.
Efesios 5:21-27
Efesios 5:21-27
Deberes conyugales
Sométanse unos a otros, por reverencia a Cristo. Esposas, sométanse a sus propios esposos como al Señor. Porque el esposo es cabeza de su esposa, así como Cristo es cabeza y salvador de la iglesia, la cual es su cuerpo. Así como la iglesia se somete a Cristo, también las esposas deben someterse a sus esposos en todo.
Esposos, amen a sus esposas, así como Cristo amó a la iglesia y se entregó por ella para hacerla santa. Él la purificó, lavándola con agua mediante la palabra, para presentársela a sí mismo como una iglesia radiante, sin mancha ni arruga ni ninguna otra imperfección, sino santa e intachable.
Sométanse unos a otros, por reverencia a Cristo. Esposas, sométanse a sus propios esposos como al Señor. Porque el esposo es cabeza de su esposa, así como Cristo es cabeza y salvador de la iglesia, la cual es su cuerpo. Así como la iglesia se somete a Cristo, también las esposas deben someterse a sus esposos en todo.
Esposos, amen a sus esposas, así como Cristo amó a la iglesia y se entregó por ella para hacerla santa. Él la purificó, lavándola con agua mediante la palabra, para presentársela a sí mismo como una iglesia radiante, sin mancha ni arruga ni ninguna otra imperfección, sino santa e intachable.
3- Los hijos
Efesios 6:1-2
Hijos, obedezcan en el Señor a sus padres, porque esto es justo. «Honra a tu padre y a tu madre —que es el primer mandamiento con promesa—
4- El trabajo
Efesios 6:5-9
4- El trabajo
Efesios 6:5-9
Siervos, obedezcan a sus amos terrenales con respeto y temor, y con integridad de corazón, como a Cristo. No lo hagan sólo cuando los estén mirando, como los que quieren ganarse el favor humano, sino como esclavos de Cristo, haciendo de todo corazón la voluntad de Dios.Sirvan de buena gana, como quien sirve al Señor y no a los hombres, sabiendo que el Señor recompensará a cada uno por el bien que haya hecho, sea esclavo o sea libre.
Y ustedes, amos, correspondan a esta actitud de sus esclavos, dejando de amenazarlos. Recuerden que tanto ellos como ustedes tienen un mismo Amo en el cielo, y que con él no hay favoritismos.
Y ustedes, amos, correspondan a esta actitud de sus esclavos, dejando de amenazarlos. Recuerden que tanto ellos como ustedes tienen un mismo Amo en el cielo, y que con él no hay favoritismos.
5- Ministerio
Efesios 6:12-18
Porque nuestra lucha no es contra seres humanos, sino contra poderes, contra autoridades, contra potestades que dominan este mundo de tinieblas, contra fuerzas espirituales malignas en las regiones celestiales. Por lo tanto, pónganse toda la armadura de Dios, para que cuando llegue el día malo puedan resistir hasta el fin con firmeza. Manténganse firmes, ceñidos con el cinturón de la verdad, protegidos por la coraza de justicia, y calzados con la disposición de proclamar el evangelio de la paz. Además de todo esto, tomen el escudo de la fe, con el cual pueden apagar todas las flechas encendidas del maligno.Tomen el casco de la salvación y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios.
Oren en el Espíritu en todo momento, con peticiones y ruegos. Manténganse alerta y perseveren en oración por todos los santos.
El ministerio es la última prioridad, porque las demás prioridades tienen que estar en orden para que ésta se cumpla.
Oren en el Espíritu en todo momento, con peticiones y ruegos. Manténganse alerta y perseveren en oración por todos los santos.
El ministerio es la última prioridad, porque las demás prioridades tienen que estar en orden para que ésta se cumpla.
Lo más importante es adorar y honrar a Dios con nuestras vidas. Y en la forma de honrar a Dios no debemos descuidar lo que Él nos regala. Para Jesús es muy importante la familia, tanto que no desea que la descuidemos por el servicio en la iglesia.
Jesús desea que cada cosa que hagamos sea para honrarlo a Él.
"En conclusión, ya sea que coman o beban o hagan cualquier otra cosa, háganlo todo para la gloria de Dios." 1 Corintios 10:31
Acuérdate de tu Creador
Eclesiastés 12
Acuérdate de tu Creador
en los días de tu juventud,
antes que lleguen los días malos
y vengan los años en que digas:
«No encuentro en ellos placer alguno»;
antes que dejen de brillar
el sol y la luz,
la luna y las estrellas,
y vuelvan las nubes después de la lluvia.
Un día temblarán los guardianes de la casa,
y se encorvarán los hombres de batalla;
se detendrán las molenderas por ser tan pocas,
y se apagarán los que miran a través de las ventanas.
y se encorvarán los hombres de batalla;
se detendrán las molenderas por ser tan pocas,
y se apagarán los que miran a través de las ventanas.
irá disminuyendo el ruido del molino,
las aves elevarán su canto,
pero apagados se oirán sus trinos.
Sobrevendrá el temor por las alturas
y por los peligros del camino.
Florecerá el almendro,
la langosta resultará onerosa,
y no servirá de nada la alcaparra,
pues el hombre se encamina al hogar eterno
y rondan ya en la calle los que lloran su muerte.
Acuérdate de tu Creador
antes que se rompa el cordón de plata
y se quiebre la vasija de oro,
y se estrelle el cántaro contra la fuente
y se haga pedazos la polea del pozo.
y por los peligros del camino.
Florecerá el almendro,
la langosta resultará onerosa,
y no servirá de nada la alcaparra,
pues el hombre se encamina al hogar eterno
y rondan ya en la calle los que lloran su muerte.
Acuérdate de tu Creador
antes que se rompa el cordón de plata
y se quiebre la vasija de oro,
y se estrelle el cántaro contra la fuente
y se haga pedazos la polea del pozo.
Volverá entonces el polvo a la tierra,
como antes fue,
y el espíritu volverá a Dios,
que es quien lo dio.
como antes fue,
y el espíritu volverá a Dios,
que es quien lo dio.
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