El poder de Dios se libera cuando oramos con fe, confiamos y le creemos, porque la fe agrada a Dios.
La expectación es un atributo de la fe que tiene su propia clase de poder, el poder de la esperanza. La fe está más allá de la lógica, o algo que podamos explicar, alcanza lo espiritual, ve más allá de las limitaciones y espera que el poder sobrenatural de Dios se muestre y haga lo que ninguna persona en la tierra podría hacer.
Por otra parte, la duda teme que nada bueno sucederá; no es algo que Dios pueda bendecir. No tenemos poder cuando vivimos en duda, decepción y falta de confianza en Dios.
¿Estás pasando por un momento así? Si hoy no crees que Dios puede cambiar tu situación, te invito a confiar una vez más en Él.
Incluso si las cosas no funcionan exactamente de la manera que esperabas que fueran, confía nuevamente en Dios, sólo Él sabe lo que es mejor y sigue esperando que Él haga grandes cosas.
«Sólo en Dios halla descanso mi alma; de él viene mi esperanza.»
Salmos 62:5
Sin importar cuál sea la situación por la que estés pasando, hoy puedes tener paz si confías en Dios.
«Bendito el hombre que confía en el Señor,
y pone su confianza en él.
Será como un árbol plantado junto al agua,
que extiende sus raíces hacia la corriente;
no teme que llegue el calor,
y sus hojas están siempre verdes.
En época de sequía no se angustia,
y nunca deja de dar fruto.»
Jeremías 17:7-8
Dios promete bendecir a los que confían en Él.
«Confía en el Señor de todo corazón,
y no en tu propia inteligencia.
Reconócelo en todos tus caminos,
y él allanará tus sendas.»
Proverbios 3:5-6
Porción del libro "Hearing from God Each Morning" de Joyce Meyer.
y no en tu propia inteligencia.
Reconócelo en todos tus caminos,
y él allanará tus sendas.»
Proverbios 3:5-6
Porción del libro "Hearing from God Each Morning" de Joyce Meyer.
