Un estilo de vida de oración

linda postal con mensaje


De todas las cosas que los discípulos de Jesús observaron en Él, sobre lo que decía y hacia, la Biblia registra sólo una cosa que ellos le pidieron les enseñara -cómo orar al igual que Él lo hacía (Lucas 11:1). Podríamos preguntarnos: “¿Por qué los discípulos le pidieron que les enseñara a orar en vez de, cómo hacer grandes cosas, como alimentar multitudes, calmar tempestades, echar fuera demonios, sanar a los enfermos, resucitar muertos o caminar sobre las aguas?”. Es porque ellos vieron que Jesús oraba más que cualquier otra cosa.

Los discípulos vivieron con Jesús. Iban a todas partes con Él y lo observaron durante tres años y medio. Las Escrituras indican que Jesús oraba por horas cada mañana. Marcos 1:35, dice: “Levantándose muy de mañana, siendo aún muy oscuro, salió y se fue a un lugar desierto, y allí oraba”. Jesús se podría haber levantado cuando todavía los discípulos se levantarían y preguntarían: “¿Dónde está el Maestro?” Cuando lo encontraban, lo mirarían orando.

Jesús pasaría unas cinco horas con Dios, su Padre, luego se iba hacia algún lugar para pasar unos pocos minutos sanando a un ciego o echando fuera demonios. Nótese la relación: Él pasaba horas orando y unos pocos minutos ministrando. Probablemente, los discípulos dirían: “!Eso es impresionante! ¡Esto debe significar que lo que Jesús hace orando por la mañana es mucho más importante que todo lo demás que Él hace durante el día!”

¿Cuál es la cosa más importante que usted hará hoy? ¿Será pasar tiempo en oración ante el Señor? ¿No debería serlo?


Oh Jehová, oye mi oración, escucha mis ruegos;

Respóndeme por tu verdad, por tu justicia.

Salmos 143:1

Tomado del Libro Devocional Diario de Poder - Dr Myles Munroe

Entradas que pueden interesarte